Los accionistas de Ferrovial aprobaron el jueves un plan para trasladar la sede del gigante español de la construcción a los Países Bajos a pesar de las objeciones del gobierno de izquierda de España.
La empresa, que opera el aeropuerto londinense de Heathrow y tiene proyectos de carreteras en EE. UU., dice que la medida le dará acceso a crédito más barato y aumentará su atractivo para los inversores de capital antes de la salida a bolsa prevista en EE. UU.
Pero el Gobierno del presidente del Gobierno socialista Pedro Sánchez, que se enfrenta a elecciones generales a finales de año, acusa a Ferrovial de pretender pagar menos impuestos, acusación que rechaza.
Según un plan revelado por primera vez en febrero, la empresa se trasladará a través de una fusión inversa, en la que la filial holandesa del grupo absorberá el holding español.
“Se ha aprobado”, dijo Rafael del Pino, presidente y principal accionista de la compañía, luego de que la propuesta se sometiera a votación en la junta general anual de accionistas.
El gobierno criticó duramente la medida, acusando a Ferrovial y a su jefe multimillonario de deslealtad.
Señaló que la adjudicación de contratos públicos a la empresa, que fue fundada por el padre de Del Pino en 1952, la ayudó a convertirse en una de las empresas españolas más grandes.
Se acusa a Ferrovial de intentar aprovechar los impuestos holandeses más bajos sobre la renta y los dividendos de las empresas.
“Hay extraordinarios ejemplos positivos en España de grandes empresarios que son leales a su país”, dijo Sánchez el mes pasado.
“No creo que ese sea el caso del señor Del Pino”, agregó.
– No salir de España –
Del Pino, de 64 años, que controla alrededor del 20 por ciento de Ferrovial, es la tercera persona más rica de España, con una fortuna estimada en 4.500 millones de dólares, según Forbes.
La compañía ha crecido a lo largo de las décadas desde un humilde constructor de ferrocarriles hasta un conglomerado global que ha ganado contratos para el Museo Guggenheim en Bilbao y los Juegos Olímpicos de Barcelona.
Además de operar el aeropuerto de Heathrow, la división de autopistas de peaje de Ferrovial incluye proyectos en Australia, Canadá y Estados Unidos.
Ferrovial justificó el traslado previsto de su sede con el argumento de que generó más del 80 por ciento de sus ingresos el año pasado fuera de España.
Argumenta que la medida no afectará sus operaciones en España, que emplea a unos 5.500, ya que seguirá pagando impuestos.
“Feruvial no se irá de España”, dijo Del Pino al inicio de la junta general anual.
Ferrovial mantendrá su actividad, funciones, proyectos, plan de inversiones y cotización en las bolsas españolas.
Del Pino añadió que la empresa pagaría una cantidad “similar” de impuestos en España después de la transferencia como lo hizo.
Dijo que Ferrovial pagó 282 millones de euros (311 millones de dólares) en impuestos en España el año pasado.
– ‘Ningún problema’ –
Pero el gobierno, que teme que otras empresas sigan el ejemplo de Ferrovial, argumenta que una empresa con sede en España puede cotizar en Estados Unidos.
“No hay problema con una doble cotización. Una empresa con sede en España puede cotizar en la bolsa estadounidense”, dijo la ministra de Presupuesto, María Jesús Montero, al canal de televisión privado Antena 3.
En una carta enviada al gobierno el martes, el presidente ejecutivo de Ferroval, Ignacio Madridegos, dijo que ninguna empresa con sede en España tiene una cotización completa en Estados Unidos todavía.
El Banco Sabadell de España estima que la empresa podría ahorrar 40 millones de euros al año en pagos de impuestos si trasladara su sede a los Países Bajos, pero otros expertos estiman que la cifra es mucho más baja.
El movimiento planeado de Ferrovial sigue los pasos de otras grandes compañías europeas como el fabricante de aviones Airbus, que tiene su oficina principal en Toulouse, Francia, pero está registrada en la ciudad holandesa de Leiden.
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