Antes del 2010, Synthia no existía, pero ahora es considerada un organismo vivo creado artificialmente. El equipo de investigadores encabezado por el científico J. Craig Venter, logró desarrollar y dar vida a Mycoplasma laboratorium, un organismo sintético que requirió una inversión millonaria en proyectos de genética.
El objetivo principal de este proyecto fue estudiar el número mínimo de genes necesarios para crear un organismo vivo. Para ello, utilizaron inicialmente Mycoplasma genitalium, dado que posee un genoma pequeño. Sin embargo, posteriormente lo reemplazaron por M. Mycoides, debido a su capacidad de crecimiento más rápido.
El proceso consistió en ensamblar fragmentos de ADN para crear el genoma completo y luego insertarlo en otra bacteria de la familia Mycoplasma. En un principio, el reconocido científico George Church afirmó que este organismo no debía considerarse como sintético. Sin embargo, posteriormente se desarrolló una versión con menos genes, lo que la convirtió en la primera bacteria completamente sintética reconocida.
Además de este importante avance, otros científicos también han creado organismos sintéticos, como el genoma de un virus bacteriófago denominado ΦX174. Esto ha sido posible gracias a los avances en la edición genética, que permiten realizar cambios precisos en el ADN y diseñar organismos desde cero.
En la actualidad, se ha logrado sintetizar y modificar los 16 cromosomas del genoma de la levadura Saccharomyces cerevisiae de manera sintética. Para ello, se ha utilizado un sistema llamado SCRaMbLE, que permite reordenar los genes y generar una mayor diversidad controlada.
El objetivo final de estos avances en la investigación genética es crear el primer organismo eucariota 100% sintético. De conseguirlo, se podrían producir una amplia gama de moléculas de interés en la levadura, lo que representaría un gran avance en diversos campos, como la medicina y la biotecnología.
Estos logros científicos son fundamentales en la búsqueda de nuevas soluciones y avances en la biología sintética, un campo de estudio que continúa expandiéndose y sorprendiendo con sus resultados. Sin duda, estos avances marcan un antes y un después en la forma en que concebimos y manipulamos la vida misma.
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