Un reciente estudio conjunto llevado a cabo por la Universidad de Oulu y la Fundación del Instituto Deaconess de Oulu, en Finlandia, ha revelado que mantener un ritmo de sueño irregular puede tener consecuencias negativas para la salud cardiovascular de las personas de mediana edad, independientemente de la cantidad de tiempo que se duerma.
Los resultados de la investigación, publicados en el ‘Journal of Activity, Sedentary and Sleep Behaviors’, sugieren que los horarios de sueño incoherentes pueden afectar especialmente el perímetro de la cintura, un indicador importante de la salud cardiovascular.
Este estudio es el primero de su tipo en utilizar un monitor de actividad para medir la actividad física y el ritmo del sueño en una población de mediana edad. Los investigadores descubrieron que la actividad física regular puede reducir la asociación perjudicial entre un ritmo de sueño irregular y los factores de riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Se encontró que la irregularidad en el ritmo de sueño se asociaba con un mayor perímetro de cintura, sin importar la cantidad de actividad física que se realizara o la cantidad de tiempo que se pasara en la cama durante la noche.
Para llevar a cabo el estudio, se utilizaron datos exhaustivos de investigación recopilados de individuos nacidos en 1966 en el norte de Finlandia. Se descubrió que los participantes se acostaban, en promedio, a las 23:22, se despertaban a las 7:17 y pasaban un promedio de 7 horas y 57 minutos en la cama.
La variación en el ritmo de sueño se refería a una hora promedio de acostarse y levantarse más tarde de lo habitual. Aunque estudios anteriores habían relacionado el ritmo de sueño irregular con la salud cardiovascular, estos se habían centrado principalmente en trabajadores por turnos. Sin embargo, este nuevo estudio demuestra que otros factores también influyen en el ritmo del sueño y su impacto en la salud.
Los investigadores destacan la importancia de tener en cuenta la regularidad del ritmo de sueño y la actividad física al brindar consejos de salud. El funcionamiento del ritmo interno de una persona se basa en ciclos de aproximadamente 24 horas, por lo que mantener un ritmo constante es esencial para una buena salud cardiovascular.
En resumen, este estudio conjunto revela que mantener un ritmo de sueño irregular puede tener consecuencias negativas para la salud cardiovascular en personas de mediana edad. La actividad física regular puede ayudar a contrarrestar estos efectos negativos, pero es importante tener en cuenta tanto la regularidad del ritmo de sueño como la actividad física al brindar consejos de salud.
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