El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, se han comunicado por teléfono luego del reciente ataque de Irán a Israel. En la llamada, Biden reafirmó el compromiso de Estados Unidos con la seguridad de Israel y condenó la ofensiva llevada a cabo por Irán.
Ante esta situación, Biden ha convocado a los líderes del G7 para coordinar una respuesta diplomática y ha tomado medidas para apoyar a Israel en la defensa contra los drones y misiles iraníes. Sin embargo, Washington busca evitar ser arrastrado a una guerra regional y está trabajando para mantener el apoyo a Tel Aviv de manera estratégica.
El presidente Biden interrumpió su fin de semana para reunirse con el Consejo de Seguridad Nacional y coordinar acciones con Israel. Previamente, Israel había bombardeado el consulado iraní en Damasco, lo que aumentó la tensión en la región.
Estados Unidos ha movilizado aviones y destructores de misiles para apoyar a Israel en su defensa contra Irán, mientras que la ONU ha convocado una reunión de urgencia del Consejo de Seguridad para abordar la situación. El embajador de Israel en la ONU ha solicitado acciones concretas contra Irán, mientras que la misión de Irán en la ONU ha pedido a Estados Unidos que se mantenga al margen.
El secretario general de la ONU ha condenado los hechos y ha pedido el cese de las hostilidades ante el temor de una escalada de la violencia en la región. La situación continúa siendo tensa y las acciones diplomáticas están en curso para evitar un conflicto mayor en Medio Oriente.
