Jaime Mata se convirtió en el héroe indiscutible del Getafe al anotar los tres puntos con un remate poco ortodoxo pero decisivo, en el emocionante encuentro contra el Celta. El equipo madrileño logró una importante victoria en casa, aunque no sin sufrir.
El partido comenzó favorable para el Getafe, quienes lograron ponerse en ventaja rápidamente con dos goles a su favor. Sin embargo, el Celta hizo un gran esfuerzo por remontar y finalmente logró empatar el partido, dejando a los aficionados en suspenso.
Fue entonces cuando entró en acción el joven talento del Getafe, Greenwood, quien puso un centro perfecto que culminó en un gol de éxtasis para los locales. Este gol desató la euforia en el estadio y le devolvió la ventaja al equipo.
No contento con eso, Jaime Mata anotó el segundo gol de la tranquilidad para el Getafe, antes de que lo hiciera Mayoral. Parecía que el partido estaba sentenciado a favor de los locales, pero la entrada del temido Iago Aspas en el campo cambió el rumbo del encuentro.
El Celta no se dio por vencido y, gracias a los goles de Larsen y Allende, silenciaron el estadio Coliseum y pusieron en aprietos al Getafe en los minutos finales. Sin embargo, el equipo local logró mantener la ventaja y asegurar la victoria.
Pero la jornada no estuvo exenta de sustos para el Getafe, ya que su entrenador, Bordalás, sufrió un choque fortuito que lo hizo caer al suelo. Afortunadamente, logró recuperarse rápidamente y celebrar la victoria con alegría junto a su equipo.
Con este triunfo, el Getafe sigue sumando puntos en la tabla de clasificación y se acerca cada vez más a los puestos de competición europea. Por su parte, el Celta continúa luchando por alejarse de la zona de descenso y buscará mejorar en los próximos partidos.
En definitiva, un emocionante encuentro que tuvo de todo: goles, remontadas y un entrenador que superó un susto para celebrar la victoria con su equipo. El Getafe demuestra una vez más su fortaleza y capacidad de reacción, mientras que el Celta deja claro que luchará hasta el final.
